La adicción a las drogas es una enfermedad crónica, en la cual el consumo y conducta buscadora compulsiva de una droga persisten independientemente de los efectos negativos que estas sustancias generan.
La marihuana inicialmente causa una sensación de relajación o euforia, seguido de una fase que tiene un efecto depresivo o la persona puede sentir sueño. Altera la memoria, la atención, causa reacciones lentas, altera la coordinación y el balance corporal. Está demostrado que produce pérdida de neuronas, y te quema el cerebro.
Es posible desarrollar una adicción a los componentes del Cannabis como el tetrahidrocannabinol (THC) que se encuentra en la marihuana. La gente que tiene una adicción a la marihuana, por lo general usa la droga todos los días. Sienten la necesidad de usarla regularmente, algunos manifiestan que les da placer y relajación.
Los síntomas del uso y la dependencia pueden incluir: aumento en la percepción visual, auditiva y gustativa, mala memoria, aumento de la presión arterial y el ritmo cardíaco, ojos rojos, disminución de la coordinación, dificultad para concentrarse, aumento del apetito, pensamiento paranoide y enlentecimiento de las reacciones.
El uso de la marihuana se ha asociado a la presentación de la esquizofrenia a una edad más temprana. También es fundamental comentar que hay suficiente evidencia para advertir a los jóvenes que se drogan con marihuana que tienen mayor riesgo de desarrollar una enfermedad psicótica más adelante en su vida.
Se han identificado ciertas asociaciones genéticas que producen mayor riesgo a desarrollar psicosis o esquizofrenia por consumir marihuana. Los genes que se han asociado son COMT que también participa en el riesgo adictivo a la cocaína, y mutaciones en este gen a su vez, también se han asociado al desarrollo de la esquizofrenia paranoide.
Mutaciones en el gen AKT1 localizado en el cromosoma 14, también se han asociado a un mayor riesgo para desarrollar crisis psicóticas, y en particular psicosis relacionada con el consumo de Cannabis. Se ha demostrado que las personas que consumen diariamente esta droga y tienen una mutación particular del gen AKT1 tiene siete veces más riesgo para desarrollar psicosis.
La marihuana puede contener otros componentes tóxicos asociados, ya que la persona no sabe lo que contiene cuando la compra en la calle o a un vendedor (dealer). Un caso que demuestra lo peligroso que puede llegar a ser este hábito es la intoxicación por plomo que ocurrió en Leipzig, Alemania. Durante un periodo de 3-4 meses, 29 personas fueron internadas con síntomas de intoxicación por plomo como náuseas, vómitos, anemia, fatiga, encefalopatía con alucinaciones, neuropatía periférica, y niveles tóxicos de plomo y otros hallazgos en el examen de sangre.
Cuando la policía analizó el contenido de la marihuana que se vendía encontró que el 10% del peso correspondía a plomo, lo que significó una ganancia para el dealer de 1.000 euros (1.500 dólares) por kilo de marihuana. Cuando una persona fuma un porro de marihuana, la temperatura puede llegar a 1.200°C, lo que hace que el plomo se absorba efectivamente por el tracto respiratorio causando los síntomas que fueron descritos.
Como todas las drogas, la marihuana genera efectos adversos, y algunos son muy graves como la psicosis. Por lo tanto, hay que parar con esta buena prensa que tiene el Cannabis ya que está destruyendo a millones de jóvenes, y es una puerta de entrada junto con el alcohol, y el cigarrillo al uso, abuso y dependencia de otras sustancias.
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